jueves, 14 de enero de 2010

"La Manifestación de Mierda" y suave reflexión sindical.


No hace mucho se celebró lo que yo llamo desde entonces “La Manifestación de Mierda”.

Los sindicatos de este país convocaron a sus gentes, con dudosa participación, a manifestarse, bajo un lema u otro, bajo unas premisas u otras, contra los empresarios.
ESO ES LO MÁS ABSURDO QUE SE PUEDE VER.

Veamos con calma y atendamos; ¿A los empresarios? A los empresarios les debería dar igual. Estamos todos de acuerdo entonces que la manifestación fue contra el gobierno, no hay más vuelta de hoja. Siguiendo esta lógica si no se pretendía advertir al gobierno lo único que hicieron fue repartirse unas cuantas dietas, gastar dinero que no está para eso en movilización etc. Y escuchar a al “Gran Payasomin”. O sea, una quedada de piqueteros, igual engrasando la maquinaria que debe estar bastante oxidada por tanta inacción. ¿Dónde estaban ante tanto ERE a mediados y principios de aquella crisis tantas veces negada por el gobierno?

Los sindicatos de nuestro país, y me refiero a UGT y CCOO tienen varios defectos demasiado graves así como actitudes desleales y trasnochadas, deberían cerrar.

¿Cuánto tiempo hace desde que acabó la Segunda República? Creo que vamos ya para cien años ¿A qué esas banderas?

Antes de continuar quiero decir a todos aquellos sindicalistas que ven muy bien eso de que Papa Estado les de buenos dineros y piden que la Iglesia sea autosuficiente que si quieren eso, de acuerdo. Cero euros para los sindicatos y cero para la Iglesia a ver quién sobrevive y a ver donde se empiezan a morder el cuello unos a otros.

Por cierto, yo sé de buena tinta, que hijos de sindicalistas con alguna responsabilidad en las organizaciones se pegan buenas vacaciones y fines de semana de marcha en los pisos que tienen en Madrid, por ejemplo, que no sé si los compró la UGT o Comisiones con el dinero del Estado o directamente les fueron regalados.

Por otro lado, para los que no lo sepan, hay un mamoneo de padre y muy señor mío con los cursos de formación y sepa Dios como han repartido con algunas empresas los dineros europeos para cursos de formación online o presenciales.

¿Qué quieren y para qué sirven? ¿Quiénes son y de qué parte están? ¿Quién fiscaliza sus cuentas y donde están esos informes?

A mí no me sorprende que sigan mudos y se hagan acompañar de ZP en sus actos anuales. Entre rojos anda el juego. Están en tiempos de la revolución industrial, en la lucha de clases y para mí no son más que unos botarates.

Si sólo buscaran mirar por sí, quitarse horas de trabajo consiguiendo muchos ser liberados sindicales o buscarse la vida de forma indigna a mí no me parecería bien pero bueno. No contentos con ello son cómplices necesarios en la insoportable crisis económica y en el mantenimiento de ZP en el poder. ¿Qué defienden? ¡Qué se yo!

Os contaré como agarraron del cuello a un liberado sindical de IKEA en Málaga;

Resulta que mientras la carga de trabajo en el establecimiento malagueño cada vez era mayor, un buen día, el liberado sindical, tipo que según me contaron no hacía nada absolutamente, se permitió decir ante algunos compañeros que estaba aburrido. Los compañeros hasta arriba de curro, y el impresentable se aburría, así que ocurrió algo evitable tal vez pero que refleja bien como se siente un trabajador que tiene que rendir y es responsable cuando está harto de trabajar y encima un sindicalista le viene a tocar las pelotas con comentarios para nada dignos de una persona cabal.

¡SE LE TIRÓ ENCIMA!

Magna la que se pudo liar, si no le sujetan deja al sindicaperro sin lomo. Y yo, que jamás justifico la violencia le entiendo, porque es que las cosas se están yendo de madre.

Es lo que tenemos, sindicatos rojos instalados en ideas fracasadas de hace setenta años, subvencionados hasta la médula, incapaces de hacer nada para ayudar a este país, con la cara muy dura. A veces parece que todo es suyo, normal, son los protegidos de la izquierda más radical de los últimos años. En realidad son los mismos, son hermanos, aliados ¿Qué diferencia hay entre un político de izquierdas actual y un sindicalista? Alguno se salvará seguro, pero pocos.

YO ME NIEGO A DAR UN DURO A LOS SINDICATOS.

Y ojalá alguna vez en este país todos podamos decidir si los mantenemos o no y por supuesto, mientras sí y no, explicaciones claritas de actividades, manejo de dineros etc...

Igual, mientras llega otro Aznar y no volvemos a ver alguna que otra “manifestación de mierda” contra los autónomos, Esperanza Aguirre, La Generalidad Valenciana. Todo menos lo que tienen que hacer.

He obviado hablar de la situación real de muchos trabajadores porque supongo que todos más o menos sabemos que hay gente currando a 4.5 E hora, haciendo horas extras por narices, explotados por jefes indignos, pero ¿Qué es eso para UGT y CCOO comparado con la fertilización cruzada PSOE-SINDICATOS?

Y a todo esto, ése que ya está tardando en irse y pedir perdón de rodillas, sí Mariano Rajoy "el mudo", parece el de los hermanos Marx pero sin gracia, no se atreve a enfrentarse a ellos. Yo del PP abriría un frente tipo “Vamos a poner en su sitio a los sindicatos y que los españoles se enteren de lo que hay”. Pero claro, para eso hay que tener coraje. Bueno paro que me caliento y me voy del tema.



El lema era "Que no se aprovechen de la crisis" (Hay que tener poca vergüenza)

¿No os estaréis aprovechando vosotros con los dinerillos de los cursos?
¿Qué precio tiene el silencio?


¡QUÉ NO SE APROVECHEN DE NOSOTROS!



Un abrazo.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Totalmente de acuerdo. La derecha liberal debería asumir el discurso del laicismo con todas sus consecuencias. El dinero público debe ser para financiar las actividades del Estado, neutral ideológica o confesionalmente ante todos. No se debería financiar con partidas anuales a ninguna organización no estatal, ni iglesias, ni sindicatos, ni ongs, ni asociaciones, ni partidos políticos. Son los afiliados, socios o feligreses los que deben sostener la financiación de sus propias organizaciones con sus propios recursos. El Estado sólo debe garantizar que se respete el derecho de libre asociación y libre culto, pero no subvencionar a nadie. La disciplina del gasto público debería ser obligatoria por ley.

Fonador dijo...

La triste realidad. Los correveidiles de todas las empresas e instituciones. Las orejas de la "Administración "socialista. La gestapo amenazadora del pobre que suspira por un poco de libertad si no es la suya... eso son.